Jessy Lizardo cuenta con un testimonio de sanidad y restauración impactante, que ha estado compartiendo a través de sus redes sociales, charlas, conferencias, además del libro “Nuevos Comienzos”, que lanzó a finales del 2017, junto a un álbum de igual título. Sin embargo, en el 2018 la salud de Jessy se vio muy deteriorada por el impacto de la enfermedad de fibromialgia, la cual se cree que padece desde su infancia y que a partir de este tiempo se apoderó de su cuerpo, manteniéndola en cama, literalmente.

Este proceso sirvió, más que nada, para Dios mostrar Su gloria “levantándola” y dándole nuevas fuerzas para seguir su ministerio. Por esto la sorpresa de Jessy al escuchar las letras de esta canción y quedar tocada por el Espíritu Santo al cantarla por primera vez en su voz, buscando no escatimar esfuerzos al momento de producirla para poder transmitir a todo el que la escuche eso mismo que ella sintió de parte de Dios.